martes, 26 de noviembre de 2013

Crónica de conciertos: Disgorge + Extirpating the Infected, Sevilla 18/11/2013


No es lo más normal empezar en el primer párrafo dando pistas claras sobre las impresiones que ha dejado en el redactor el evento, así el lector no pierda el interés a las primeras de cambio mientras espera el "veredicto". No obstante, no puedo sino rendirme a la evidencia de que ha sido sin duda uno de los mejores conciertos del año en Sevilla, y estoy teniendo en cuenta tanto a las bandas locales como a las profesionales. Y tal vez porque nadie de todos los que estábamos allí nos esperábamos que la cita fuera tan bien (siempre suele haber algún problema con estas bandas relativamente underground), que la sorpresa y el agrado fue mayor.
Aunque no cambian cosas como el habitual retraso a la hora de abrir puertas (de la hora programada, las 9, pasó a las 10:30), por esa vieja estrategia de esperar a la gente, allí estábamos los 40/50 “de siempre” aficionados a  esta música, poco en principio, pero lo suficiente para hacer bulto y que El Holandés Errante, a primera vista tuviera una afluencia notable de público. Tampoco se esperaba a nadie más, el Brutal Death Metal siempre tendrá un público ínfimo.
Volviendo a la cita en sí, los Extirpating the Infected confirman que progresivamente están saliendo unas bandas de Metal Extemo desde Andalucía con un gran nivel. Por citar unos ejemplos: los Kevlar Skin y Digging Your Tomb, ambos cordobeses, los Dying sevillanos, los Endless de Almería, por poner algunos ejemplos y que os hagáis a la idea…
Nada más entrar en la sala el muro de sonido que eran los cordobeses, impresiona. Una de estas cosas que piensas que viene de California, Florida o Alemania, y no, resulta que se hace aquí, además y por una vez, el sonido era muy bueno, sin grandes pegas, tanto en Extirpating como en Disgorge (aunque si el de los primeros, era notable, en los de San Diego era casi perfecto), así que podíamos oír todo con nitidez, algo que creo que es imprescindible en esta música tan cafre, donde por sus características, es muy fácil provocar una bola de ruido.
Suele ser un tópico decir que una banda suena mejor en directo que en estudio… pero es que en este caso fue la más absoluta verdad. Arrancaron con Glutony y Menstrual Gourmet, tema del que recientemente estrenaron vídeo hace muy poco y promete ser el adelanto de su nuevo disco “Reborn In Putrefaction”, del cual nos dejaron algunos cuantos cortes como Romantic Tales. Independientemente de que fueran temas inéditos o viejos, cada uno de ellos es un auténtico martillo pilón: grave, constante, mecánico, y sin apenas descanso entre un tema y otro, salvo para las habituales charlas para levantar el ánimo del público mediante bromas  y coñas. Desde luego, con sus instrumentos se ganaron por completo el respeto de un público expectante a la salida de los californianos, y para cuando acabó  Blood Dinner, creo que ninguno solo dudó de la capacidad que tienen los cordobeses de seguir creciendo. 

Ahora, que lo que nos iba a caer encima con DISGORGE no se lo esperaba nadie. Los californianos son una de esas bandas, alumnas fieles de los SUFFOCATIONPIREXIA, que siempre han estado en segunda o en tercera fila por no estar en el lugar y momento adecuado, y así se han separado, han vuelto, han tenido mil cambios de miembros, algo corriente en este tipo de situaciones.
Eso sí, quedó claro que la enésima reinvención de DISGORGE funciona a las mil maravillas, porque vaya nivelazo que Ricky Myers que aporreaba su batería a un nivel digno de una metralleta, el trabajo de Ángel Ochoa a las voces no se quedaba ni mucho menos atrás, un auténtico armario empotrado que escupía gruñidos guturales infrahumanos, que aún me pregunto como pudo aguantar los 40/50 minutos sin ahogarse y encima manteniendo el nivel en todas y cada una de las canciones. Y lo mismo puedo decir de los otros cuatro miembros sobre el escenario…
A estas alturas de la historia, nadie espera un nuevo disco de los de San Diego, y ni falta que hace, siendo sinceros porque harán lo mismo de siempre, como siempre han hecho, y segundo, porque clásicos tienen de sobra, y unos cuantos se plantaron aquella noche: Revelations XVIIIShe Lay Gutted, Craneal Impalement, o el “hit” Consume The Forsaken, que cerró el concierto tras un bis pedido por toda la sala, que, aunque conscientes que es una música que tiene un desgaste físico impresionante, nos sabía a muy poco. ¿Densidad, repetición? Esos conceptos no existían esa noche, porque el estado de forma de la banda era insultante, y si los cuerpos de los interpretes aguantasen más, podríamos haber estado dos horas, o cuatro.
No nos engañemos, fue corto y se hizo más corto aún, por la intensidad y la naturaleza del concierto. A cambio, tuvimos uno de los shows asombrosamente mejor ejecutados de 2013. Ni bolas de ruido, ni monotonía… nada de eso, si acaso más bestias las bandas en directo que en estudio. Imposible saber si Disgorge o en definitiva, cualquier banda del mismo “palo” vendrá de nuevo. Ahora que, tengo el convencimiento de que la buena impresión fue mutua. Espero no equivocarme.
Fotografías cedidas por Alba Correa.

Publicado originalmente y cedido por Subterráneo Heavy