Camino de Nervión: Historia viva del barrio a través de la fotografía.

Un trozo de la historia de Sevilla, de uno de sus barrios más singulares, Nervión, puede contemplarse en el Palacio de la Buharia hasta el 31 de enero, a través de una breve pero intensa exposición fotográfica, organizada por el Instituto de las Artes y Cultura de Sevilla (ICAS), la Fundación Cruzcampo y el Distrito Nervión (comandado bajo el Ayuntamiento de Sevilla). El archivo gráfico utilizado viene desde el Archivo y Fonoteca Municipal.

A través de sus dos salas (una interior y otra exterior), cubren la historia del barrio desde principios del siglo XX, cuando no era más que un compendio de zonas como San Bernardo o Gran Plaza, hasta finales del siglo. Mostrando así la evolución de la zona: como el aspecto "rural" del barrio, va dejando paso a ensanche de avenidas, los coches, el aumento de viviendas y pisos...

La exposición cuenta con varios bloques presentados por: Víctor Fernández Salinas (Profesor Titular de la Universidad de Sevilla de Geografía e Historia), Alfonso Jiménez Martín (Arquitecto, Maestro de obras de la Catedral de Sevilla), Julio Ariza Conejero (Profesor de Lengua española y Literatura en el Colegio Inmaculada Corazón de María -Portaceli- de Sevilla), Julio Cuesta Domínguez (Presidente de la Fundación Cruzcampo), Ramón Rodríguez Verdejo "Monchi" (Ex Jugador de fútbol, Consejero y Subdirector general deportivo del Sevilla F.C.) y Enriqueta Vila Vilar (Historiadora, Directora de la Real Academia de las Buenas Letras de Sevilla).

Todos ellos explican su particular versión del barrio de Nervión: desde las cofradías y diversos eventos religiosos, pasando por la arquitectura y la industria de la zona, donde cobra un papel muy importante la antigua fábrica de Cruzcampo, uno de los mayores motores económicos de la ciudad, la relación del barrio con el deporte, en especial  con el Sevilla FC, e incluso la educación en la zona, con los numerosos colegios religiosos que habitan y siguen habitando Nervión hoy día.

El acceso a la exposición es totalmente gratuito, y su horario es de Lunes a viernes de 08.30h a 21.30h. Y Sábados de 08.30h a 14.30h.

Fuente: Web oficial del ICAS

El Pabellón de la Navegación vuelve al Antiguo Oriente.

Uno de los más famosos edificios de la Expo 92 acogerá la exposición "Templo Abu Simbel. El tesoro de los faraones". En la que el inmueble bañado por el Guadalquivir se convertirá por dentro en una reproducción a escala de este templo construido bajo las órdenes de Ramsés II, allá por el 1284 a.C.

El artífice de esta transformación es el artesano egipcio Hany Mostafa, que ha organizado la recreación de la estructura en las siguientes partes: Una fachada con cuatro estatuas que representan a Ramsés II, dos cámaras que recrean las del templo original y el Santuario. Siempre respetando las pinturas originales, y las dimensiones de las figuras que allí se encuentran, a pesar de que el Pabellón sea una escala ligeramente reducida del templo profanado por el explorador italiano Giovani Belzoni en 1817.

La exposición cuenta además con información adicional del templo, desde su creación, su época de esplendor, la decadencia, el olvido y su posterior redescubrimiento, además de cómo se construyó desde cero y cuales fueron los posibles métodos para hacerlo.

Tras pasar una breve gira portuguesa por Óvidos o Lisboa, la exposición permanecerá en Sevilla hasta el 4 de mayo, cuando parta hacia tierras francesas y británicas. El horario es de 10:00 a 20:00 todos los días de la semana, con un precio general de 5 euros, 4 para estudiantes y grupos de más de 20 personas, y 12 como precio familiar (pareja adulta y dos niños menores de 8 años).

Fuente: Pabellón de la navegación.

Souvenir de la vida: El legado de Guillermo Pérez Villalta

El Centro Andalúz de Arte Contemporáneo acoge hasta el 12 de enero el trabajo pictórico de Guillermo Pérez Villalta. El veterano artista tarifeño ha hecho una selección de las obras que considera más representativas de una carrera, una carrera que dura ya 40 años y es imposible de abarcar en una simple exposición. En cierto modo, Villalta ha sido coleccionista de su propia obra, que dona al museo todo su legado artístico mediante testamento.

Aunque el grueso de la exposición es la pintura, la arquitectura y la escultura también tienen su hueco. En esta se reflejan todos los temas que el gaditano se ha empeñado siempre en reflejar. En "Andalucía y Andalucía Moderna" retrata enclaves andaluces inolvidables para el, a modo de los Grand Tour europeos del Siglo XIX, y cómo han cambiado estos paisajes de Andalucía a lo largo de los años.

"Tánatos", una serie de esculturas que como su propio nombre indica, aborda la muerte y la pérdida de los seres queridos. En las figuras, Pérez Villalta aprovecha para desarrollar su técnica, desde figuras realistas, hasta otras que rozan la abstracción. En "El Mundo en Gabinete" situado en el punto más antiguo del monasterio, imita a los antiguos gabinetes de curiosidades o de coleccionistas.

"El lado tangible de la vida material" nos adentra en el trato de los objetos, su organización formal y simbólica, y una dimensión alegórica que en nuestros días aparece casi totalmente olvidada. Las cosas, enseres, útiles para Guillermo, con un significado más allá del puramente utilitario de hoy día.

En "Joyería y el mundo de lo exquisito", nos ofrece una selección de lo más refinado de Villalta, con sus pinturas más elitistas y sus coqueteos con el mundo de la joyería y la orfebrería, y la paciencia con la que trata estas obras para conseguir el resultado exacto y que sean apreciadas por el espectador.

En "Eros y Pan", explora el mindo del deseo, del gusto, el arte y el erotismo, como parte de un núcleo común, donde aparecen sus datos biográficos ocultos, invisibles a simple vista, como su sexualidad, sus parejas, fetiches... Todo bajo clara influencia de la tradición pagana y erótica del mundo grecolatino.

La exposición está abierta de martes a sábado de 11:00 a 21:00, ylos domingos y festivos de 11:00 a 15:00. La entrada es de 1'80 euros para todos los públicos, salvo a partir de las 19:00, que es gratuita.

Fuente: Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC)

Crónicas de conciertos: Diabolus in Extremis + Rancor + Khoan, Cádiz, 28/12/13

Nos acercábamos el día de los inocentes a la Sala Supersonic. Un local con buen aspecto y que a pesar de ser un tanto pequeña, al menos esta noche no hizo ninguna jugarrerta a los grupos, pues precisamente era la noche menos indicada para ello. Los Diabolus In Extremis acababan en Cádiz una larga gira que les ha hecho patearse la península de arriba a abajo constantemente. En esta ocasión los acompañantes eran los thrashers madrileños Rancor, otros que con “Dark Future” están ganando mucha importancia a nivel nacional, y los “novatos” de la noche, los almerienses KHOAN con una propuesta algo más moderna y alejada del Thrash.

La verdad es que no tenía ni la más remota idea de qué esperar de Khoan, me contaban amistosamente que mil géneros les habían encasquetado. Y es que a veces es mejor limitarse a escuchar y ver, que las etiquetas queden para un análisis posterior… así que lo limitaré a Groove Metal, no ultra mega embrutecido como podría ser Lamb Of God, pero si que se nota el cariño por el Metal noventero de gente como Machine Head o algo más moderno como Chimaira… o del mal llamado Metal Alternativo, véase Deftones, de los cuales se notaba, y mucho, la alargada sombra en los temas más calmados y sobretodo en una versión del Change (In the House of Flies). Sorpresa bastante agradable para un fan de los Deftones.

Su actuación se puede resumir en que fueron sencillos pero directos al grano, y así pues, difícil aburrirse. Se dedicaron a descargar su único EP, junto con algunos temas que no estaban en dicho trabajo, desconozco si serán nuevos o fueron incluidos en alguna demo previa, más dos versiones, la antes mencionada y un Roots Bloody Roots que fue tocada algo a destiempo. Realmente el único pero que podría llegar a ponerles. Para ser una banda novel, dieron la talla, en todo momento se mostraron muy seguros sobre el escenario, y realmente, da igual lo que toquen, mientras dejen una buena sensación entre los asistentes.

Siempre he pensado que el Thrash es un género más para disfrutar en directo que para escucharlo en disco.

Rancor no solo no decepcionaron en su actuación, sino que sonaron aún mejor que en sus obras de estudio. No seré nunca el tío más thrasher del mundo, pero hay que reconocer que dentro de la nutrida escena española, quitando a Angelus Apatrida que hace mucho que juegan ya en una liga superior, Rancor tienen una muy merecida crepercusión underground… . Su thrash inspirado por la escena de la costa este norteamericana, suena directo. 

Su set estuvo centrado en el “Dark Future” y era como si te tirasen el disco a la cara. Empezaron con The Last Drop of Blood y Addicted To Hate, para continuar con material de su debut, “Release The Rancor”, que también tuvo una representación bastante nutrida, y ya desde los primeros compases ya tenían a todos los asistentes embobados. Se nota, y mucho, cuando una banda lleva “rodaje” sobre las tablas y pueden hacer su repertorio sin problema alguno. Mucha profesionalidad y mucha energía fue lo que transmitieron. No hace falta ni que diga todo fan de thrash ochentero debe ver a los madrileños sí o sí. Algo obligatorio viendo la calidad de esos cinco tíos sobre el escenario, ni un solo de guitarra mal puesto siquiera. 

Los últimos en aparecer serían los Diabolus In Extremis, con el papel más importante de todos, como es el de cerrar la gira de su primer disco “Parar el Tiempo”. Los he visto en varias ocasiones y en ninguna de ellas me he arrepentido, es más, han ido mejorando. Esta vez tocaban en su ciudad, en una fecha simbólica y tenían tiempo para hacer un concierto en condiciones. Lo que no entiendo es como los gaditanos no son más conocidos. Tuvieron el escenario para ellos y lo destrozaron. Si Rancor dejaron el listón muy alto, los D.I.E. no podían ser menos. Repartieron el setlist entre canciones del ya consabido “Parar el Tiempo” como Maldito Traidor, Sol Negro, Tocar el Cielo o Ni Un Día Más, más temas del que será nuevo disco, véase Impostor, Rebelión, y dos estrenos, como eran Verdugo y Sin Salida.

Desde luego, influía que jugaban en casa, por la familiaridad y cercanía que tenían y que se les veía más cómodos que nunca, plasmando todos los temas sin fallo alguno, y al igual que los Rancor, demostrando una profesionalidad impecable. Así que me repetiré, completamente recomendables en directo, una patada en la boca de Thrash, Groove o lo que sea, pero desde luego los de Cádiz también prometen.

Tal vez esta crónica pueda ser considerada algo blanda, poco crítica, pero es que si las dos bandas grandes son muy buenas, habrá que decirlo. Todo salió como tuvo que salir y nos quedamos con un pedazo de concierto para acabar el decrépito 2013. Una de las mejores noches del año, sin duda alguna. Esperemos que el 2014 también cumpla en esta materia.

Contenido originalmente publicado para Subterráneo Heavy

Entrevista con Orthodox

Orthodox no son la típica banda de Metal sevillano, su música va mucho más allá, fusionando los raíces del Heavy Metal con el Jazz, el Blues, el Drone, han conseguido sonar únicamente a ellos mismos. Algo que parece imposible en estos tiempos de clones musicales. Hablamos con Marco Serrato, vocalista y bajista (en ocasiones contrabajista) sobre la banda, los proyectos de futuro e inspiraciones musicales.

¿Cómo empezó la banda, en qué momento os juntáis todos y formáis esta banda con influencias tan… peculiares?

Marco: Cuando conocemos a Borja (batería), porque Ricardo (guitarra) y yo, ya estábamos tocando juntos en algún grupo. Pero cada vez que queríamos llevar las cosas un poquito más allá, siempre había alguien que frenaba, hasta que conocimos a Borja, nos juntamos los tres, y ya desde el primer ensayo, que empezamos a grabar el primer tema, y vimos que funcionaba, que a los tres nos gustaban las mismas locuras y conectaba la locura de uno con la del otro, hicimos el grupo.

Lo que más llama la atención es que tenéis temas de 20, 26 minutos ¿Lo hacéis premeditadamente tan largos o como os salga?

Marco: Como salga. Hay veces que sí, algunos temas empecemos pensando: “vamos a componer un tema largo”, pero simplemente nos ponemos a juntar ideas y hay veces que acabamos a los cuatro minutos. También tenemos temas muy cortos. Y hay veces que vemos que el desarrollo nos lo va pidiendo y tiramos para delante.

Volviendo al principio, el primer disco, “Gran Poder” era más “ortodoxo”, más “normal”, más Doom… relativamente.

Marco: Relativamente, si. Era más guitarra, bajo, batería, con riff y para delante, digamos.

Pero es que luego en “Amanecer en Puerta Oscura”, cambiasteis completamente.

Marco: Yo no diría completamente, pero bueno, cambia el tema de la instrumentación.

El primer tema del disco suena completamente a Jazz.

Marco: Si, también hay elementos de Jazz en “Gran Poder”, pero bueno, es más evidente si usas un contrabajo e instrumentos de viento.

Pero en “Gran Poder” dices tú: “mira estos chavales, que quieren jugar al Doom, al Drone…”

Marco: Sí, pero quisimos salir rápidamente de ahí, porque era una cosa que se iba a quemar enseguida. Y bueno, ya hicimos lo que queríamos hacer. De todas formas fue rápido, antes de acabar “Gran Poder” ya estábamos con ese tipo de temas, pero vamos, que es algo bastante natural para nosotros.

Luego, en “Acensión”, el disco con ese tema tan largo ¿de dónde surgió ese tema tan raro?

Marco: No es deliberadamente raro, es raro porque ya te digo que nos gusta hacer locuras, lo hemos hecho desde el principio. Y esa era otra más. De todas maneras hay una conexión conceptual con los otros discos, como un tercer capítulo. Esos tres discos están pensados casi en el mismo momento. No fue acabar “Gran Poder” y “ahora que hacemos”, acabar “Amanecer” y lo mismo. Cuando estábamos haciendo “Gran Poder”sabíamos cual iba a ser más o menos el segundo y cual el tercero, y por donde iban a ir los tiros. Luego también es el concepto de ese primer disco oscuro, con una temática más pagana, el segundo como una especie de transición, y el tercero con más referencias cristianas y muchas al tema del “Terror Blanco”.

”Baal” he visto que es como más convencional, nuevamente.

Marco: Si, es relajado, porque la tirada de los otros tres nos agotó, y “Baal” fue como: “venga, vamos a relajarnos un poco otra vez, hacemos riffs, guitarra, bajo, batería…” Un disco más cómodo de componer, que luego nos permitiera también tener canciones para tocar en directo, cuando pudiéramos acarrear todo el tinglado que supone hacer lo otro (se refiere al material experimental).

Os he visto dos veces, la primera teloneando a Scott Kelly, hace ya dos años, casi tres. Entonces teníais un set muy raro, dos canciones muy largas, muy ambiental… y luego ya cuando os vi la siguiente vez, fue más convencional. Entonces ¿habéis tocado más conciertos de estos “raros”?

Marco: Esos son los que menos. Para nosotros el concierto ideal de ORTHODOX es un concierto en el que esté todo, y se vea realmente como casan los temas unos con otros. No nos gusta tampoco que parezca esa especie de: Tenemos dos caras, que nos puedes pillar el día jazzero o no. Es todo lo mismo, pero claro, por temas puramente de infraestructuras, de poder contar con otro músico, de cargar con un contrabajo, con un teclado, para los cuatro duros que nos van a dar, pues al final tiramos mucho de guitarra, bajo, batería, tocamos los temas con riff y demás. Nos gustaría poder cobrar más en los conciertos y hacerlo todo. Hacer un concierto de dos horas, en el que tu puedas escuchar como los temas se unen, como fluye todo de una cosa a otra. Y no ofrecer esa imagen que parece que tenemos de banda de dos caras, que no sabes cómo te van a venir.

Hemos hecho algún concierto en el que hemos podido hacer todo. Para nosotros no está separado, como la parte Jazz y eléctrica. Pero hay elementos Jazz cuando tocamos en eléctrico, y para nosotros, cuando cogemos el contrabajo, estamos pensando en Heavy Metal. No separamos. Hay elementos Jazz en los discos de BLACK SABBATH. Para nosotros es un error ver eso como separado, que pegamos cosas, mezclamos, fusionamos… Vamos a la esencia, y la esencia del Metal para nosotros tiene ese punto oscuro, depende con lo que lo hagas. Cómo hacía CELTIC FROST, cuando te cogía instrumentos de cuerda, o te mete unas tubas, y sigue siendo Heavy.

¿Vuestras influencias a la hora de crear ORTHODOX?

Marco: Hombre, hay algunas que digamos, están por dentro, de lo que hemos “mamao” cada uno, pero si es verdad, que cuando nos juntamos, las que te pueden resultar más evidentes están ahí: Sunn O))), Earth, losTeeth Of Lions Rule The Divine, los Melvins, Neurosis, Cathedral… Todas esas cosas las tenemos ahí. Coltrane, los compositores más oscuros, tipo Ligeti, Messiaen… Sin embargo, también está el bagaje de cada uno. Yo por ejemplo, a mi el Thrash Metal de los 80 es la música con la que quizás más conecte, o no sé, otros grupos grandes del Heavy Metal, como Iron Maiden, Blue Oyster Cult, Slayer, Metallica o Danzig.

Ahí están los agradecimientos de “Baal” que son larguísimos, con mil bandas nombradas.

Marco: Sí, porque ese disco es muy retorcido en el fondo. Es sencillo pero fue nuestra manera deliberada de hacer un disco “mediocre”. Como esos discos mediocres de un grupo que a ti te gusta mucho, que empiezas menospreciándolo pero que acaba siendo tu favorito, como el “Fear Of The Dark”. En ese disco hicimos de todo, en el libreto nos extendimos más que otras veces, pusimos la letra, pusimos la típica lista de agradecimientos que se acuerda uno hasta de su abuela… Si te fijas en los anteriores libretos nunca habíamos dado las gracias a nadie. Fue como una lista de agradecimiento de toda la carrera, que ya iba siendo hora.

Otra cosa que llama bastante la atención ¿Por qué vestís de penitentes?

Marco: Porque era como la guinda del pastel del concepto con el que estamos trabajando, la parte oscura del cristianismo, y de unos penitentes tocando música pesada, pues era como la forma más evidente de reflejar lo que hacíamos.

Al principio de vuestra carrera, llevabais traje, luego no, después habéis vuelto….

Marco: Bueno, no hemos vuelto. Lo usamos cuando sabemos que está todo controlado. Si vamos a estar en un concierto en el que va a haber técnicos de sonido, va a haber gente responsable, si pasa cualquier historia y la cosa va a seguir para delante bien, las usamos. Ahora, si vamos a tocar en una sala, en un bar en el que hay cualquier problema técnico y vamos a tener que parar, o hay que hablar con el técnico: “oye, súbeme aquí”, se rompe la magia y queda absurdo ir con el teatro montado. La parafernalia funciona si estamos rodeados de un equipo que funciona y está todo controlado, se usa. Si no, no, porque el riesgo de tener que parar el concierto a la mitad y tener que decirle “¡illo súbeme!” vestido de nazareno… (risas). Ese es el motivo.

Cuando es un concierto por y para vosotros, si.

Marco: No por y para nosotros, es un tema sobre todo técnico, que haya infraestructuras técnicas adecuadas que nos rodeen y nos sintamos arropados, que cualquier fallo no impida que el concierto siga adelante. Tuvimos una mala experiencia con eso, en el Roadburn de Holanda, fuimos vestidos de penitentes, la guitarra no sonaba bien y ya tiramos adelante porque en una sala, una vez que empiezas, no se acaba.

Tenéis títulos como “Gran Poder”, Puerta Osario, títulos que parece de Semana Santa, esta fiesta en qué nivel os ha influenciado?

Marco: Bueno, no somos capillitas realmente, pero la Semana Santa refleja lo que estaba en el concepto del grupo, de ese lado oscuro del cristianismo. A estas alturas Satanás es simpático, a todo el mundo le cae bien, Satanás es guay. Lo que da miedo es Dios, ese Dios que tiene todas las respuestas y que tiene la última palabra sobre la vida de los demás, y que además sangra. Da miedo. Luego la Inquisición, Torquemada… Sevilla es un sitio clave de la Inquisición y de su cristianismo oscuro, la contrarreforma, la música de la Semana Santa, una estética que es muy disfrutable. Entiendo el capillismo, que haya gente que quede atrapada por ese mundo, porque puede ser adictivo. Hay muy buena música de Semana Santa, y para nosotros es algo natural.

Vuestro último lanzamiento ha sido una especie de “Best Of”, “Conoce los caminos”. Y luego un disco en directo, en cassette. Lo primero, ese disco de rarezas, ¿por qué lo sacasteis?

Marco: Las rarezas porque hay gente que le gusta Orthodox, que realmente lo tenía difícil para conseguir muchas de las cosas que teníamos. Primero porque habían salido en sellos pequeños, porque estaban en vinilo, y era gente que no compra vinilo, o eran tiradas muy cortas, o alguien que se había comprado “Gran Poder” de Alone Records y no tenía los bonus tracks que incluía el de Southern Lord, y no se iba a comprar otra vez el disco. Fue una manera de hacer borrón y cuenta nueva, vamos a recopilar todo lo que se nos ha quedado por ahí, añadir algo nuevo, para quien lo tenga, también. Había cosas que teníamos ahí guardadas, que no funcionaban en un disco, pero tenían validez para nosotros, lo pusimos todo junto y fuera.

La cinta la grabamos sin querer, porque en ese concierto realmente ni siquiera toca Orthodox, que es lo bueno. Es un concierto en el que íbamos a tocar Hidden Forces Trio, tocaba Jacob, pero nos falló el clarinetista de Hidden Forces Trio. Entonces tocamos Borja y yo, y en algún tema se subió Ricardo, estaba David Cordero de JACOB, y como ese concierto se estaba grabando, y nos gustó lo que salió, pues “palante”. Lo editó Knockturne Records, que está ahora con el formato cassette, que nos gusta también.

Pero realmente es un concierto en el que ORTHODOX ni siquiera estaba en el cartel.

¿Y por qué en cassette, si es un formato que en teoría no tiene vida útil?

Marco: Bueno, yo escucho cassettes por ejemplo. Tengo mi radio de la cocina, me pongo a cocinar, me pongo mi cinta y lo disfruto. Entonces para mi tener una cinta de ORTHODOX era algo de puta madre. Es un formato barato, que se complementa con la descarga para el que no tenga cassette, y Knockturne son amigos, querían sacar un cassette y ahí tienen.

Como no nos gusta ser elitistas y exclusivistas con ese tipo de cosas, me gustaría pensar que con el tiempo habrá algún otro recopilatorio y la gente que no lo puede tener, tenga acceso a esto.

Por cierto ¿está el concierto completo?

Marco: Creo que todo lo que tocamos con el núcleo de ORTHODOX sí está ahí, creo que no se tocó más nada. Pero claro, eso fueron dos, tres temas aparte del resto de los grupos del cartel, si hay algo más no me acuerdo, de verdad.

Habéis tocado en el Roadburn, en el Primavera Sound, en el Incubate, el Hellfest… Y luego he oído hablar de vosotros hasta en Metalsucks, Terrorizer, fuera tenéis mucho éxito.

Marco: Bueno, no tanto éxito. Si, somos un grupo underground que es conocido fuera.

Pero en España no os hacen ni puto caso

Marco: Bueno, hemos tocado en el Primavera al menos, que ya nos ha sorprendido. Pero es que aquí en España, ¿a quién le hacen caso? A los cuatro grupos estos rancios que rodean al Mariskal Romero y compañía (risas). Aquí en España es lo que hay, pero bueno, ni nos quejamos de eso, porque es algo con lo que nunca hemos contado. Sabe uno ya lo que hay. Pero hasta que no nos han llamado del Primavera, no había un equivalente nacional de festival grande que nos llamara para tocar, como festivales que nos han llamado de fuera. Nos han llamado del Hellfest, del Roadburn, del Supersonic… y sin embargo aquí de España no, hasta que llegó el Primavera, que apostó un año por un poquito de metaleo.

En Sevilla tenemos a los Monkeypriest, dentro del rollo lento,Blooming Latigo, ¿pero qué más hay?

Marco: Hay Jacob, hay Pylar, me encanta Malheur, grupos en los que tocamos nosotros también me encantan, como Jacob o Hidden Forces Trio, que hacemos Free Jazz Borja y yo. David Cordero hace un montón de cosas interesantes… La verdad es que en nada de tiempo han salido muchas cosas interesantes, pero vamos, casi todos los que te estoy comentando, están en Knockturne Records o son músicos que alguno toca en este lugar (risas). Los Monkey, Tentudía…

¿Algún proyecto más en el que estés involucrado?

Marco: Jacob, con David Cordero, que es contrabajo y el con el ordenador haciendo efectos y demás, tengo una cosilla entre manos, un poco más clasicota, que todavía no ha salido, estamos ahí mezclando y ya saldrá, pero es de guitarra, bajo, batería. También estoy tocando yo solo, con el contrabajo. Estoy tocando en la calle (risas), estoy estudiando contrabajo clásico.

Volviendo a Orthodox, a corto medio plazo ¿qué tenéis pensado, algún concierto para el 2014?

Marco: Nuestro plan es dedicar 2014 a componer un disco nuevo, simplemente. Por primera vez nos hemos quedado en blanco y tenemos que empezar a lo Tábula Rasa. Estamos esperando a que Borja llegue y después de las navidades nos vamos a sentar y ver qué vamos a hacer.

Contenido publicado originalmente para Subterráneo Heavy.

Extracto de la entrevista:

Crónica de conciertos: Female Metal Fest, Sevilla, 13/12/13

Es interesante que lleguen este tipo de propuestas, relativamente distintas a lo que podemos encontrar en Sevilla, un concierto centrado en las voces femeninas. Quedaba ver si la gente respondería, si la organización estaba a la altura, o incluso si podría abrir un precedente. Si por algo se dice que es el primer Female Metal Fest, es porque se espera que hayan más, ¿no?

Lo insólito era la localización de la sala, básicamente el piso de arriba de una discoteca, con lo que era una escena curiosa. Para empezar porque nunca he visto un concierto de este tipo en una terraza, luego porque no era extraño encontrarse a algún visitante extraviado de la planta de abajo, que entraba más por curiosidad que por otra cosa.

Con respecto a las bandas de la jornada, tres propuestas muy distintas cuyo único punto en común era tener una mujer a las voces, y dos de ellas, desafortunadamente tenían la voz jodida, así que realmente no pudieron dar todo lo que prometían. Los primeros serían la banda de versiones Nomes 13, y centrados en temas de finales de los 90/2000 de bandas como Muse, System of a Down, Evanescence o Skunk Anansie, poco tienen que ver unos con otros, sí, pero como suele pasar, la elección de las bandas y el repertorio suele ser algo democrático, y dentro de lo que cabe, tampoco hay abismos estilísticos entre grupos. Lo bueno de este tipo de bandas es que al menos su repertorio, aunque ajeno, se lo saben al dedillo, diferencias con la banda original aparte, que las habrá, cómo no. Cumplieron, y con la inestimable ayuda de samplers, mantuvieron más fidelidad con unos temas que otros, ej, los temas de Muse no me llegaron a convencer del todo, no obstante System of a Down o Evanescence salieron mejor parados. El objetivo final era ni más ni menos que caldear el ambiente con más de un hit del pasado, a tenor de las miradas de interés de la gente, lo lograron.

Los siguientes en pasar por el escenario serían Esseker. Que practicaban una especie de Rock melancólico y triste, no en el mal sentido, claro, que sin ser un experto en la materia, me recordaron a The Birthday Massacre o Sober. También y por desgracia, su cantante Kristina también tenía la garganta jodida, y más evidente se hacía si tenemos en cuenta que la gran mayoría de los temas requerían notas altas. No quiero decir, ni mucho menos que fuera un caos en este sentido, todo lo contrario, intentaba llegar una y otra vez, a riesgo de joderse más la garganta. Por ganas no podemos culparla.

Ahora, aquí los problemas técnicos, fueron a más: el sonido que “bailaba” de un lado a otro, zumbidos insoportables que venían sin avisar y taladraban oídos, o la guitarra solista, que de pronto decidió hacer huelga silenciosa. El resto, os lo imagináis: los típicos arreglos que deben hacerse improvisados para que la actuación no se vea demasiado resentida. 

Y una pena, más allá de que salieron con la cabeza bien alta al escenario, intentaron que, en la medida de lo posible los problemas no les afectaran a la actuación. Al menos, el piano, parte integral del sonido, salió intacto de la quema. Si bien lo que practicaban estos chicos se aleja de mis estándares convencionales, hay que reconocer que supieron estar a la altura de la situación, aunque uno se quede con las ganas de saber cómo habrían sonado en mejores circunstancias.

La historia variaría para bien con Light Among Shadows, tal vez porque el sonido no les castigó tanto, que eran los últimos en tocar, y como quien sale por detrás en un tramo de tierra en rallies, tenían la pista más “limpia” y fueron mucho mejor. Vamos, que ya sabían el panorama que se iban a encontrar. Y resulta que con su Heavy Metal alegre, los gaditanos están recorriendo ya parte de la península, con tan solo “Welcome… Back!” como debut y un EP. Pero la verdad es que los cuatro funcionan a las maravillas en directo, tanto su bajista Christopher Red, como su guitarrista y cabeza pensante Adrien Fowl, siempre están interactuando entre ellos, María Barragán, y su batería (aunque más apartado, como es lógico) Alejandro Tineo.  Los cuatro siempre con una sonrisa en la boca, muy buen ambiente entre ellos. 

También se notaba que llevaban un tiempo de gira, con fechas repartidas en los meses de otoño, por la naturalidad con la que despachaban unos temas con otros, en otras palabras, que el rodaje se hace notar. Hasta se habían forjado una pequeña base de fans en la ciudad que ayudaban a corear en los estribillos. También tuvieron la ayuda de José García de Legendaria (otra banda de Power gaditana), para un dueto en el tema que da nombre al disco. Probablemente fue el concierto con el que, a nivel personal, quedé más satisfecho. Y aunque no hagan nava nuevo o revolucionario, si siguen trabajando pueden tener proyección nacional.

En donde sí hay que trabajar todavía, es en el aspecto organización. Sé que era el primer intento de este festival, pero hay que mejorar cosas, como el sonido, nada acertado en algunas ocasiones, o la localización, supongo que sería porque no habría otra cosa para ese día, o no alcanzaría el presupuesto, no quiero meterme en camisas de once varas. No fue una mala noche, pero podía haber salido aún mejor. Nadie ha dicho que los comienzos sean sencillos.

Contenido publicado originalmente para Subterraneo Heavy.

"Comics" de Guillermo Balbontín.

La exposición se realiza en la taberna / galería Ánima, situada en la C/ Miguel Cid, 80, todos los días desde el mediodía hasta bien entrada la madrugada. La muestra, empezó el 3 de diciembre y se alargará hasta el 5 de enero de 2014. El artista, Guillermo Balbontín, aunque empezó tarde en el mundo pictórico, sigue manteniendo a sus 70 años una constante actividad productiva, siempre trabajando en alguna caricatura o comic. Porque precisamente la motivación principal de la muestra es la inspiración del artista en los tebeos de la editorial Bruguera publicaba semanalmente, entre otros: El doctor Cataplasma, el loco Carioco, Sir Tim O Teo, Zipi y Zape o Mortadelo y Filemón, y a aquellos dibujantes como Conti, Escobar, Ibáñez, Iranzo, Raf, que el propio artista considera como indispensables para su camino como pintor.

La muestra se compone de una nutrida selección de sus cuadros, que abarcan todo tipo de temáticas: desde la crítica a la sociedad de hoy, la falta de valores de cualquier tipo, la eterna demostración de que los políticos mienten y la absoluta desvirtuación de la religión y la cultura en el siglo XXI. Todo siempre con grandes dosis de humor, cuadros que reflejan las complejas relaciones humanas, o pequeñas historias más dramáticas inspiradas en el Hollywood clásico de los años 40 y 50, otra de las grandes referencias del artista.

Todas las obras están realizadas en acuarela, con esa estética de tebeo bien diferenciada y con el uso de otras técnicas como el collage, el surrealismo, y jugando siempre con la autoparodia y la sátira.

La entrada es completamente gratuita y para todos los públicos.

A continuación, extracto de la entrevista con el artista, explicando las motivaciones detrás de la obra.