jueves, 2 de enero de 2014

Entrevista con Orthodox


Orthodox no son la típica banda de Metal sevillano, su música va mucho más allá, fusionando los raíces del Heavy Metal con el Jazz, el Blues, el Drone, han conseguido sonar únicamente a ellos mismos. Algo que parece imposible en estos tiempos de clones musicales. Hablamos con Marco Serrato, vocalista y bajista (en ocasiones contrabajista) sobre la banda, los proyectos de futuro e inspiraciones musicales.

¿Cómo empezó la banda, en qué momento os juntáis todos y formáis esta banda con influencias tan… peculiares?
Marco: Cuando conocemos a Borja (batería), porque Ricardo (guitarra) y yo, ya estábamos tocando juntos en algún grupo. Pero cada vez que queríamos llevar las cosas un poquito más allá, siempre había alguien que frenaba, hasta que conocimos a Borja, nos juntamos los tres, y ya desde el primer ensayo, que empezamos a grabar el primer tema, y vimos que funcionaba, que a los tres nos gustaban las mismas locuras y conectaba la locura de uno con la del otro, hicimos el grupo.
Lo que más llama la atención es que tenéis temas de 20, 26 minutos ¿Lo hacéis premeditadamente tan largos o como os salga?
Marco: Como salga. Hay veces que sí, algunos temas empecemos pensando: “vamos a componer un tema largo”, pero simplemente nos ponemos a juntar ideas y hay veces que acabamos a los cuatro minutos. También tenemos temas muy cortos. Y hay veces que vemos que el desarrollo nos lo va pidiendo y tiramos para delante.
Volviendo al principio, el primer disco, “Gran Poder” era más “ortodoxo”, más “normal”, más Doom… relativamente.
Marco: Relativamente, si. Era más guitarra, bajo, batería, con riff y para delante, digamos.
Pero es que luego en “Amanecer en Puerta Oscura”, cambiasteis completamente.
Marco: Yo no diría completamente, pero bueno, cambia el tema de la instrumentación.
El primer tema del disco suena completamente a Jazz.
Marco: Si, también hay elementos de Jazz en “Gran Poder”, pero bueno, es más evidente si usas un contrabajo e instrumentos de viento.
Pero en “Gran Poder” dices tú: “mira estos chavales, que quieren jugar al Doom, al Drone…”
Marco: Sí, pero quisimos salir rápidamente de ahí, porque era una cosa que se iba a quemar enseguida. Y bueno, ya hicimos lo que queríamos hacer. De todas formas fue rápido, antes de acabar “Gran Poder” ya estábamos con ese tipo de temas, pero vamos, que es algo bastante natural para nosotros.
Luego, en “Acensión”, el disco con ese tema tan largo ¿de dónde surgió ese tema tan raro?
Marco: No es deliberadamente raro, es raro porque ya te digo que nos gusta hacer locuras, lo hemos hecho desde el principio. Y esa era otra más. De todas maneras hay una conexión conceptual con los otros discos, como un tercer capítulo. Esos tres discos están pensados casi en el mismo momento. No fue acabar “Gran Poder” y “ahora que hacemos”, acabar “Amanecer” y lo mismo. Cuando estábamos haciendo “Gran Poder”sabíamos cual iba a ser más o menos el segundo y cual el tercero, y por donde iban a ir los tiros. Luego también es el concepto de ese primer disco oscuro, con una temática más pagana, el segundo como una especie de transición, y el tercero con más referencias cristianas y muchas al tema del “Terror Blanco”.
”Baal” he visto que es como más convencional, nuevamente.
Marco: Si, es relajado, porque la tirada de los otros tres nos agotó, y “Baal” fue como: “venga, vamos a relajarnos un poco otra vez, hacemos riffs, guitarra, bajo, batería…” Un disco más cómodo de componer, que luego nos permitiera también tener canciones para tocar en directo, cuando pudiéramos acarrear todo el tinglado que supone hacer lo otro (se refiere al material experimental).
Os he visto dos veces, la primera teloneando a Scott Kelly, hace ya dos años, casi tres. Entonces teníais un set muy raro, dos canciones muy largas, muy ambiental… y luego ya cuando os vi la siguiente vez, fue más convencional. Entonces ¿habéis tocado más conciertos de estos “raros”?
Marco: Esos son los que menos. Para nosotros el concierto ideal de ORTHODOX es un concierto en el que esté todo, y se vea realmente como casan los temas unos con otros. No nos gusta tampoco que parezca esa especie de: Tenemos dos caras, que nos puedes pillar el día jazzero o no. Es todo lo mismo, pero claro, por temas puramente de infraestructuras, de poder contar con otro músico, de cargar con un contrabajo, con un teclado, para los cuatro duros que nos van a dar, pues al final tiramos mucho de guitarra, bajo, batería, tocamos los temas con riff y demás. Nos gustaría poder cobrar más en los conciertos y hacerlo todo. Hacer un concierto de dos horas, en el que tu puedas escuchar como los temas se unen, como fluye todo de una cosa a otra. Y no ofrecer esa imagen que parece que tenemos de banda de dos caras, que no sabes cómo te van a venir.
Hemos hecho algún concierto en el que hemos podido hacer todo. Para nosotros no está separado, como la parte Jazz y eléctrica. Pero hay elementos Jazz cuando tocamos en eléctrico, y para nosotros, cuando cogemos el contrabajo, estamos pensando en Heavy Metal. No separamos. Hay elementos Jazz en los discos de BLACK SABBATH. Para nosotros es un error ver eso como separado, que pegamos cosas, mezclamos, fusionamos… Vamos a la esencia, y la esencia del Metal para nosotros tiene ese punto oscuro, depende con lo que lo hagas. Cómo hacía CELTIC FROST, cuando te cogía instrumentos de cuerda, o te mete unas tubas, y sigue siendo Heavy.
¿Vuestras influencias a la hora de crear ORTHODOX?
Marco: Hombre, hay algunas que digamos, están por dentro, de lo que hemos “mamao” cada uno, pero si es verdad, que cuando nos juntamos, las que te pueden resultar más evidentes están ahí: Sunn O)))Earth, losTeeth Of Lions Rule The Divine, los MelvinsNeurosisCathedral… Todas esas cosas las tenemos ahí. Coltrane, los compositores más oscuros, tipo LigetiMessiaen… Sin embargo, también está el bagaje de cada uno. Yo por ejemplo, a mi el Thrash Metal de los 80 es la música con la que quizás más conecte, o no sé, otros grupos grandes del Heavy Metal, como Iron MaidenBlue Oyster CultSlayerMetallica Danzig.
Ahí están los agradecimientos de “Baal” que son larguísimos, con mil bandas nombradas.
Marco: Sí, porque ese disco es muy retorcido en el fondo. Es sencillo pero fue nuestra manera deliberada de hacer un disco “mediocre”. Como esos discos mediocres de un grupo que a ti te gusta mucho, que empiezas menospreciándolo pero que acaba siendo tu favorito, como el “Fear Of The Dark”. En ese disco hicimos de todo, en el libreto nos extendimos más que otras veces, pusimos la letra, pusimos la típica lista de agradecimientos que se acuerda uno hasta de su abuela… Si te fijas en los anteriores libretos nunca habíamos dado las gracias a nadie. Fue como una lista de agradecimiento de toda la carrera, que ya iba siendo hora.
Otra cosa que llama bastante la atención ¿Por qué vestís de penitentes?
Marco: Porque era como la guinda del pastel del concepto con el que estamos trabajando, la parte oscura del cristianismo, y de unos penitentes tocando música pesada, pues era como la forma más evidente de reflejar lo que hacíamos.
Al principio de vuestra carrera, llevabais traje, luego no, después habéis vuelto….
Marco: Bueno, no hemos vuelto. Lo usamos cuando sabemos que está todo controlado. Si vamos a estar en un concierto en el que va a haber técnicos de sonido, va a haber gente responsable, si pasa cualquier historia y la cosa va a seguir para delante bien, las usamos. Ahora, si vamos a tocar en una sala, en un bar en el que hay cualquier problema técnico y vamos a tener que parar, o hay que hablar con el técnico: “oye, súbeme aquí”, se rompe la magia y queda absurdo ir con el teatro montado. La parafernalia funciona si estamos rodeados de un equipo que funciona y está todo controlado, se usa. Si no, no, porque el riesgo de tener que parar el concierto a la mitad y tener que decirle “¡illo súbeme!” vestido de nazareno… (risas). Ese es el motivo.
Cuando es un concierto por y para vosotros, si.
Marco: No por y para nosotros, es un tema sobre todo técnico, que haya infraestructuras técnicas adecuadas que nos rodeen y nos sintamos arropados, que cualquier fallo no impida que el concierto siga adelante. Tuvimos una mala experiencia con eso, en el Roadburn de Holanda, fuimos vestidos de penitentes, la guitarra no sonaba bien y ya tiramos adelante porque en una sala, una vez que empiezas, no se acaba.
Tenéis títulos como “Gran Poder”, Puerta Osario, títulos que parece de Semana Santa, esta fiesta en qué nivel os ha influenciado?
Marco: Bueno, no somos capillitas realmente, pero la Semana Santa refleja lo que estaba en el concepto del grupo, de ese lado oscuro del cristianismo. A estas alturas Satanás es simpático, a todo el mundo le cae bien, Satanás es guay. Lo que da miedo es Dios, ese Dios que tiene todas las respuestas y que tiene la última palabra sobre la vida de los demás, y que además sangra. Da miedo. Luego la Inquisición, Torquemada… Sevilla es un sitio clave de la Inquisición y de su cristianismo oscuro, la contrarreforma, la música de la Semana Santa, una estética que es muy disfrutable. Entiendo el capillismo, que haya gente que quede atrapada por ese mundo, porque puede ser adictivo. Hay muy buena música de Semana Santa, y para nosotros es algo natural.

Vuestro último lanzamiento ha sido una especie de “Best Of”, “Conoce los caminos”. Y luego un disco en directo, en cassette. Lo primero, ese disco de rarezas, ¿por qué lo sacasteis?
Marco: Las rarezas porque hay gente que le gusta Orthodox, que realmente lo tenía difícil para conseguir muchas de las cosas que teníamos. Primero porque habían salido en sellos pequeños, porque estaban en vinilo, y era gente que no compra vinilo, o eran tiradas muy cortas, o alguien que se había comprado “Gran Poder” de Alone Records y no tenía los bonus tracks que incluía el de Southern Lord, y no se iba a comprar otra vez el disco. Fue una manera de hacer borrón y cuenta nueva, vamos a recopilar todo lo que se nos ha quedado por ahí, añadir algo nuevo, para quien lo tenga, también. Había cosas que teníamos ahí guardadas, que no funcionaban en un disco, pero tenían validez para nosotros, lo pusimos todo junto y fuera.
La cinta la grabamos sin querer, porque en ese concierto realmente ni siquiera toca Orthodox, que es lo bueno. Es un concierto en el que íbamos a tocar Hidden Forces Trio, tocaba Jacob, pero nos falló el clarinetista de Hidden Forces Trio. Entonces tocamos Borja y yo, y en algún tema se subió Ricardo, estaba David Cordero de JACOB, y como ese concierto se estaba grabando, y nos gustó lo que salió, pues “palante”. Lo editó Knockturne Records, que está ahora con el formato cassette, que nos gusta también.
Pero realmente es un concierto en el que ORTHODOX ni siquiera estaba en el cartel.
¿Y por qué en cassette, si es un formato que en teoría no tiene vida útil?
Marco: Bueno, yo escucho cassettes por ejemplo. Tengo mi radio de la cocina, me pongo a cocinar, me pongo mi cinta y lo disfruto. Entonces para mi tener una cinta de ORTHODOX era algo de puta madre. Es un formato barato, que se complementa con la descarga para el que no tenga cassette, y Knockturne son amigos, querían sacar un cassette y ahí tienen.
Como no nos gusta ser elitistas y exclusivistas con ese tipo de cosas, me gustaría pensar que con el tiempo habrá algún otro recopilatorio y la gente que no lo puede tener, tenga acceso a esto.
Por cierto ¿está el concierto completo?
Marco: Creo que todo lo que tocamos con el núcleo de ORTHODOX sí está ahí, creo que no se tocó más nada. Pero claro, eso fueron dos, tres temas aparte del resto de los grupos del cartel, si hay algo más no me acuerdo, de verdad.
Habéis tocado en el Roadburn, en el Primavera Sound, en el Incubate, el Hellfest… Y luego he oído hablar de vosotros hasta en MetalsucksTerrorizer, fuera tenéis mucho éxito.
Marco: Bueno, no tanto éxito. Si, somos un grupo underground que es conocido fuera.
Pero en España no os hacen ni puto caso
Marco: Bueno, hemos tocado en el Primavera al menos, que ya nos ha sorprendido. Pero es que aquí en España, ¿a quién le hacen caso? A los cuatro grupos estos rancios que rodean al Mariskal Romero y compañía (risas). Aquí en España es lo que hay, pero bueno, ni nos quejamos de eso, porque es algo con lo que nunca hemos contado. Sabe uno ya lo que hay. Pero hasta que no nos han llamado del Primavera, no había un equivalente nacional de festival grande que nos llamara para tocar, como festivales que nos han llamado de fuera. Nos han llamado del Hellfest, del Roadburn, del Supersonic… y sin embargo aquí de España no, hasta que llegó el Primavera, que apostó un año por un poquito de metaleo.
En Sevilla tenemos a los Monkeypriest, dentro del rollo lento,Blooming Latigo, ¿pero qué más hay?
Marco: Hay Jacob, hay Pylar, me encanta Malheur, grupos en los que tocamos nosotros también me encantan, como Jacob o Hidden Forces Trio, que hacemos Free Jazz Borja y yo. David Cordero hace un montón de cosas interesantes… La verdad es que en nada de tiempo han salido muchas cosas interesantes, pero vamos, casi todos los que te estoy comentando, están en Knockturne Records o son músicos que alguno toca en este lugar (risas). Los MonkeyTentudía
¿Algún proyecto más en el que estés involucrado?
Marco: Jacob, con David Cordero, que es contrabajo y el con el ordenador haciendo efectos y demás, tengo una cosilla entre manos, un poco más clasicota, que todavía no ha salido, estamos ahí mezclando y ya saldrá, pero es de guitarra, bajo, batería. También estoy tocando yo solo, con el contrabajo. Estoy tocando en la calle (risas), estoy estudiando contrabajo clásico.
Volviendo a Orthodox, a corto medio plazo ¿qué tenéis pensado, algún concierto para el 2014?
Marco: Nuestro plan es dedicar 2014 a componer un disco nuevo, simplemente. Por primera vez nos hemos quedado en blanco y tenemos que empezar a lo Tábula Rasa. Estamos esperando a que Borja llegue y después de las navidades nos vamos a sentar y ver qué vamos a hacer.

Contenido publicado originalmente para Subterráneo Heavy.

Extracto de la entrevista:

No hay comentarios:

Publicar un comentario